Imagínate siendo recibido por un par de dinosaurios robot con sombreros de botones en la recepción del Hotel Henn-na. Este es el tipo de bienvenida que ofrecen los robots que representan el 90% del personal en este hotel.
En uno de los episodios de “La Vuelta al Mundo en 80 Risas” del Canal Caracol, los presentadores viajaron a Osaka, la segunda ciudad más grande de Japón. Allí, Laura Acuña y Jhovanoty se alojaron en un hotel peculiar: fueron atendidos por recepcionistas que eran robots disfrazados de dinosaurios. Las cámaras capturaron su experiencia al hacer el check-in.
Estos dinosaurios robóticos, con una estatura que no supera el metro y medio, emiten voces generadas por inteligencia artificial y pueden comunicarse en varios idiomas. Además, mediante sensores, detectan la presencia de los huéspedes que llegan a registrarse.
Dentro del hotel Henn-na, aparte de los dinosaurios, hay otros tipos de robots que cumplen distintas funciones. Desde figuras que recuerdan al personaje BB-8 de Star Wars, encargados de la limpieza y funciones de mayordomo, hasta simulaciones de peces en contenedores de agua, robots con forma de basureros y más.
El hotel ofrece 72 habitaciones con tarifas que van desde los $60 hasta los $153 dólares por noche. Curiosamente, no se necesita una llave física o tarjeta para ingresar a las habitaciones, basta con el reconocimiento facial. Una vez dentro, la temperatura de la habitación se ajusta automáticamente a la temperatura corporal del huésped.
Inicialmente inaugurado en Nagasaki en 2015, el hotel Henn-na ha expandido su presencia y cuenta actualmente con ocho sedes en Japón. En su mayoría, el 90% de su personal son robots, incluyendo los dinosaurios y simulaciones de recepcionistas femeninas, mientras que el 10% restante corresponde a empleados humanos.
Yukio Nagai, gerente del Henn-na Hotel, menciona que “los autómatas han demostrado ser una elección eficiente para las tareas de limpieza y recepción, ya que en Japón hay escasez de empleados en la industria hotelera”. Nagai espera que, en el futuro, la automatización pueda reemplazar a la mayor cantidad posible de empleados humanos.